Los buenos libros infantiles, ya se sabe, no tienen edad: también los disfrutan los adultos por igual. Por eso nos ha gustado tanto Reflexiones de una ranita, un libro que invita a los niños a hacerse preguntas… y a los adultos a volver a sorprenderse ante el mundo como cuando eran niños. Todo ello de la mano de una simpática rana que no puede evitarlo: piensa y piensa, dialogando con su amigo ratón.
Juntos se preguntan cosas como: ¿tiene cara una almeja? ¿Dónde empieza y dónde termina el cielo? ¿Qué necesito «yo» para ser «tú»? Pero siempre con un tono fresco y ágil, que desprende ternura en cada ilustración. Ranita y Ratón dialogan de forma sencilla sobre temas que pueden ser profundos o ligeros, según juzgue el lector. Destacamos la expresividad que logra imprimir Kazuo Iwamura a sus personajes: con pocos trazos, sabe captura una duda o una sonrisa.
A medio camino entre el libro ilustrado y el manga, este volumen permite leerse de una sentada, como también releerlo, revisitar una de las páginas, dejarse maravillar al abrirlo al azar… Los niños estarán encantados con el sentido del humor de los dos simpáticos protagonistas y los adultos en cambio, verán más allá y se sorprenderán ante el calado de algunas de las situaciones planteadas, casi bordeando el haiku.
Kazuo Iwamura es un autor de libros infantiles tan valorado en Japón que cuenta con un museo propio dedicado a su obra. Hasta ahora conocíamos su tierna serie La familia Ratón. Por Reflexiones de una ranita recibió el prestigioso premio Kodansha de libros ilustrados. Aquí nos llega de la mano de Pastel de Luna, editorial que está apostando por la literatura infantil japonesa dentro de su colección oriental.
Reflexiones de una ranita te gustará si… nunca deberíamos dejar de ver el mundo con los ojos de un niño.
En la sección de libros infantiles de Haiku encontrarás todos los libros de la editorial Pastel de Luna, entre otros títulos.
